4 nov 2009

La solidaridad se enseña en casa.

A la pregunta ¿por qué hay tanta miseria en el mundo?
La primera respuesta que viene a mi mente es porque nos domina el egoísmo, generalmente pensamos primero en nosotros mismos sin importarnos si con nuestra actitud perjudicamos a otros.
Muchos afirman que este es el siglo por excelencia de los egoístas y que la solidaridad es un valor cada vez practicado por menos seres humanos, y se sostiene incluso que algunos la utilizan para generar una buena imagen pública.
Y viene a mi memoria una mañana en una escuela pública que albergaba a niños y niñas de un sector de extrema pobreza en Ica. Recuerdo que había pedido a todos mis alumnos que llevaran algunos materiales reciclables para el curso de Arte, y digo sólo algunos porque casi todos los insumos que implicaban algún costo los iba a poner yo, ya que muchas veces había observado que sus padres no se preocupaban ni por proveerles un cuaderno y un lápiz (la profesora de turno era la que se las ingeniaba para que al menos tuvieran estos útiles en clases).
Esa mañana algunos llevaron lo solicitado y otros no, así que tuve que pedirles que los que habían traído los materiales los compartieran con sus compañeros, grande fue mi sorpresa cuando observé la negativa de varios de ellos.
Al preguntarles porque reaccionaban con egoísmo ante mi sugerencia, uno de ellos me dijo: “es que mi mamá no quiere que preste mis cosas”, una respuesta que tuvo eco entre los demás y ante la que sólo pude decir “si ustedes no comparten sus cosas yo tampoco y no podremos realizar ningún trabajo”, al final de ese día todos cumplieron con el trabajo y les hice ver que de no haber colaborado todos no hubiéramos logrado nuestro objetivo, pero a mi me quedó el malestar de haber forzado una actitud que debería ser nata en ellos.
Valores como la solidaridad se aprenden en casa, son los padres los que la inculcan con la palabra pero sobre todo con el ejemplo y a los que tenemos la misión de educar nos compete reforzarla en la convivencia en el aula y de encontrarnos con la triste realidad de alumnos que no hayan vivenciado valores, tenemos la titánica tarea de sembrarlos en ellos, sabiendo que será muy difícil que ellos los asimilen como parte de su personalidad, a menos que forzemos situaciones permanentes que motiven su práctica.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

me gusta siempre leer sobre tus experiencias en el aula y fuera de ella, deberías escribir mas seguido, se que tienes mucho por contar, aunque no hay nada como escucharte mientras tus ojitos brillan

Anónimo dijo...

es que la mezquindad cada vez es mas frecuente en todos y eso viene de casa, pero con la crisis actual bueno tambien es un poco comprensible

Jesús dijo...

Hola amiga: antes de nada gracias por visitar mi blog y dejar alli tu mensaje. Admiro a las personas que como tú se dedican a educar a los niños. Tarea sumamente difícil y cada día que pasa más difícil porque la colaboración de los progenitores en dicha tarea por desgracia es menor también cada día.
Aquí en España la educación es una asignatura pendiente que cada año que pasa se hace más y más frustrante para las personas con un mínimo de principios y sobre todo para los educadores que se encuentran muy poco apoyados en su trabajo.
Un saludo muy cordial

Anónimo dijo...

tú deberías dedicarte por completo a la educación y dejar para tus ratos libres lo demás, ya debrías pensar en poner junto con tus hermanos un colegio
abrazos de todos en casa
el pequeños saltamonte

Anónimo dijo...

bueno si se debe enseñar en casa y creo que funciona mejor en familiass grandes, donde si o si se tiene que comparti algo, ´pero te cuento que soy hijo unico asi que si me cuesta un poco el compartir, aunque contigo me gustaria compartirlo TODO

Anónimo dijo...

y seguro que si, y en los hogares donde se debe practicar siempre es en aquellos que tienen mas recursos, pero muchas veces las familias ricas prefieren compartir con perros y gatos que con humanos, sé que la pobreza no se acaba con el gesto solidario de algunos pero vale la pena el intento
buen articulo y como dicen gustas más cuando cuentas tus vivencias
abrazos...