13 abr 2007

¿Religión o Derechos Humanos como curso básico en primaria?

"Soy feliz si tengo a papá y a mi mamá juntos en casa" es el coro de una canción del curso de Educación Religiosa que llevo en el Pedagógico, que según mi profesora se lo debo enseñar a mis niños en el aula.
Soy católica, pero jamás le enseñaría a mis niños una canción como esa, porque siento que iria en contra de su autoestima, es más mis padres se divorciaron cuando yo tenía 6 años y sé que si una maestra me hubiera cantado esa canción, me habría lastimado.
En la actualidad, la mayoría de niños de una escuela estatal, lo digo porque hago prácticas en una, proviene de hogares cuyos padres son separados, son niños que necesitan más amor y sobre todo contrarrestar de una u otra manera esa ausencia física en su hogar.
Como formadores tenemos la obligación de consolidar su autoestima y no de atentar contra ella, por eso creo que la enseñanza de la religión católica en las escuelas del Estado, al margen de atentar contra el libre derecho a credo, no es la mejor manera de formarnos como ciudadanos íntegros y que el Ministerio de Educación debería reemplazar este curso por el de Derechos Humanos o Civismo.
Mientras tanto le regalaré a mi profesora de religión el radioclip "Mi familia es así, como es la tuya", que de manera ágil enseña a valorarnos dentro del entorno en que vivimos.
Este radioclip lo encontrarás en http://www.radialistas.net/clip.php?id=1500101

6 comentarios:

Anónimo dijo...

es cierto, esta comprobado que la religión solo entorpece la armonía en una sociedad
Carlos

Anónimo dijo...

no hay nada peor que las religiones que tienen el dogma de que debes de creer aunque no veas. De acuerdo contigo la religion deberia de deaaparecer de los cursos del colegio.
Javier

Anónimo dijo...

Estudie en un colegio de monjas, y creeme no hay personas mas intolerantes que ellas. Bien lo que escribes.
Ximena

Fernando Nerú dijo...

Desde los albores de la civilizacion, el hombre le dio forma a la piedra o le asigno poderes magicos al sol o a la tierra y a aspectos tan intranscendentes, que hoy en nuestros tiempos son insulsos.
El hombre siempre se preocupo por tener una deidad a la cual seguir y adorar; además de concatenar el sognificado de su existencia con rasgos de divinidad, lo que dio como resultado inefables episodios de la historia universal.
En el cosmos existen tantas creencias como arenas en el mar. pero, existe una diferencia basica entre la neurosis y la estupidez, que es la brecha que cercena el significado de la palabra paz y humilla al mas desvalido con fanfarria y celebraciones fastuosas llenas de oro y pan.
No niego la existencia de Dios, ni atento contra su palabra; al fin y al cabo Él no esta en las doctrinas, en el pulpito, ni en la sotana "impoluta" de tantos que anteponen a su nombre "cardenal",
"arzobispo" o "sacristan".
Dios esta en las heridas que no dejan de sangrar, en los huesos tisicos de alguien que clama por el agua y el pan, en el mendigo desnudo y lacerado por el frio concreto, y en la sonrisa inocente de los niños, que algun dia esta tierra han de gobernar.

FERNANDO MARTINEZ.
poemaxv_82@hotmail.com

Anónimo dijo...

Como dice Ricardo Arjona en su canción "Jesus verbo no sustantivo", ...señores no dividan la fe, las frinteras son para los paises, en este mundo hay mas religiones que niños felices...
Fabiola

Unknown dijo...

La enseñanza de la religión en la escuela se ha convertido en objeto controversial desde cuando se tienden a reemplazar una enseñanza del hecho religioso por una enseñanza de ética. La comunidad educativa, debe ser un espacio de transformación de lo humano y de lo social. Existe educación cuando se intenta transformar positivamente a la persona y, por medio de ella, a la sociedad. Esta formación se lleva a cabo desde el respeto a la intimidad y a la libertad personal.
Una enseñanza que desconozca o que ponga al margen la dimensión moral, autoestima y religiosa de la persona sería un obstáculo para una educación completa, porque “los niños y los adolescentes tienen derecho a que se les estimule valore, reconozca como persona importante, además le ayude a apreciar con recta conciencia los valores morales, a aceptarlos con adhesión personal y también a que se les estimule a conocer y AMAR A DIOS.