Realidad de la producción televisiva en Ica

Dime que ves y te diré quién eres, fácilmente se puede aplicar en lo que respecta al nivel cultural de la teleaudiencia peruana.

Haciendo un análisis de lo que actualmente se emite en las pantallas locales, nos encontramos con un resultado realmente desalentador. Si a nivel nacional son contados con los dedos de la mano los programas producidos de corte cultural y educativo, además de los de información y opinión, en nuestra programación local no encontramos ninguno.

Tan sólo en Ica provincia, ahora contamos con más de 10 canales, pero es muy poco lo que se produce localmente y de este “poco” nada educa o culturiza a la población, pero sí podemos decir que al menos algunos de estos canales tienen el criterio de "jalar" del cable documentales de Discovery Chanel, y National Geographic entre otros, que al menos permite a aquellos que no cuentan con dicha señal a entretenerse aprendiendo

Abundan en las pantallas locales programas concursos tontos, donde la gente llama sólo por el “regalito” y ni que decir de los programas animados por chicas bailando semidesnudas, a cuyos receptores sin criterio, sólo les importa el meneo de sus curvas.

En materia de información y opinión, no pasan de dos los programas que informan con propiedad, pues la mayoría son espacios contratados por personas que ni siquiera saben hablar, lo que desde ya embrutece a su pobre teleaudiencia y lo más grave es que esos seudoperiodistas no tienen escrúpulos para mal informar y vertir opiniones y ataques a su antojo, sólo por pagar el espacio al dueño del canal

Pero lo peor de todo es que la sintonía de estos programas demuestra una vez más el por qué Ica está a nivel nacional entre los últimos en desarrollo educativo.

La mayoría de los que están en los medios televisivos no han pisado una universidad, pero si cuentan con los recursos para financiarlos y manejarlos de acuerdo a sus intereses, total para ellos es un negocio.

Es por ello vital que todas las universidades o al menos aquellas donde se enseña Ciencias de la Comunicación, cuente con un canal propio donde se emitan programas culturales y educativos producidos por los propios alumnos y profesionales egresados de éstas, que revierta la triste realidad que hoy vivimos.

Y en el caso de mi universidad, es lamentable decir que si aún no funciona un canal propio, es por intereses políticos pues ya se cuenta con la infraestructura y equipos desde hace dos años, solo falta la licencia, pero a las autoridades no les da la gana, sólo porque quienes la implementaron pertenecen a un partido político opositor al actual régimen que gobierna a mi casa de estudios y mientras ellos no lleguen a un acuerdo, todos seremos los perjudicados.

Pero al final, se sabe que lo que hacen los receptores con los medios dependerá de lo que haga la escuela con los niños, y no a la inversa pues sobre la escuela es posible actuar, no para ponerla en competencia con la televisión, porque de esa competencia la escuela saldría perdiendo antes de comenzar la carrera, sino estableciéndola como lo diferente de la televisión: es decir, el lugar donde las cosas no son ni fáciles, ni inmediatas, ni se conectan directamente con los deseos, ni siguen las modas.