El podio actual de las grandes compañías con mayor capitalización en los Estados Unidos está dominado por: Apple, Google, Microsoft y Facebook. La reciente entrada de Facebook en la clasificación implica que cuatro de las diez mayores empresas de Estados Unidos operan en el sector de la tecnología.
El valor de estas compañías en Bolsa supone la mitad de la capitalización total del S&P 10, que asciende a casi 3,6 billones de dólares. Solo Apple, que vale más de US$700.000 millones, aporta casi el 20% del total.
Facebook superó a Wal-Mart por capitalización bursátil a finales de junio, convirtiéndose en la décima mayor compañía del índice Standard & Poor’s (S&P) 500. Menos de cuatro semanas después, la red social que Mark Zuckerberg fundó en 2004 es ya la octava empresa deEEUU, con un valor de US$274.600 millones y por delante de las veteranas General Electric y JPMorgan.
Los expertos creen que la preponderancia de la industria tecnológica en el ránking de las diez mayores empresas es el único paralelismo que existe entre 1999 y la actualidad. “Entonces, había una burbuja relacionada con internet que ya no existe”, explica un empresario que invierte en firmas con componente tecnológico. El balance y la rentabilidad vuelven a ser hoy la única brújula posible, especialmente tras la crisis financiera de los últimos años.
De esta forma, Amazon crece con energía en Bolsa después de salir de pérdidas en el segundo trimestre del año. Amazon también ha sobrepasado en Bolsa al icono de los supermercados en Estados Unidos y lucha por colarse entre los diez primeros puestos de la clasificación. Los analistas creen que la empresa de comercio electrónico, fundada por Jeff Bezos en 1994 y con planes de crecer a lo grande en todo el mundo, conseguirá su objetivo.
En cambio, las acciones de Twitter caen porque la red social no logra rentabilizar su negocio y porque su ritmo de crecimiento se está ralentizando.
Los expertos tienen claro que el protagonismo del sector tecnológico seguirá aumentando en el índice de referencia de Estados Unidos, en términos de cantidad y velocidad, en tres áreas clave: capital, talento y facturación.
En los ochenta y los noventa, IBM y AT&T ocupaban los primeros puestos de un ránking caracterizado por la preponderancia de grandes petroleras, especialmente activas en la década de los ochenta. Todas ellas, excepto la omnipresente ExxonMobil, han desaparecido ya del ránking. El gigante energético General Electric también formaba parte entonces de la clasificación, a la que no ha dejado de pertenecer ningún año.
El sector tecnológico ha compartido tradicionalmente protagonismo con empresas de energía, farmacéuticas y bancos. Pero las últimas tres décadas también han dejado hueco para compañías como el fabricante de cámaras fotográficas Kodak (que hoy lucha por sobrevivir), la multinacional de refrescos Coca-Cola, la aseguradora AIG, el gigante del consumo Procter & Gamble, la tabaquera Philip Morris o el fabricante de coches General Motors.
Tan relevante como analizar la evolución del tipo de compañías que han protagonizado el empuje de Estados Unidos es ver cómo ha cambiado su valoración. En 1990, las diez mayores compañías del S&P apenas alcanzaban un valor de 440.000 millones de dólares, similar a lo que hoy es Google. Diez años después, la capitalización de los gigantes de Wall Street se multiplicó exponencialmente, hasta 2,7 billones de dólares.
Apple, fabricante del iPhone se convirtió en el número uno a finales de 2011. Y parece que lo seguirá siendo por mucho tiempo.
Publicado por la Red Iberoamericana de Prensa Económica (RIPE).