Ayer fue una vergüenza apreciar una vez más que no estamos preparados para elegir a nuestros representantes en el Legislativo.
Los que tomaron el juramento a los elegidos, dieron muestras de discriminación, ignorancia y favoritismo.
Y los que juramentaron, aludiendo un sinfín de cosas, que igual despues las pisotean, mostraron el pobre nivel educativo recibido, ya que ni siquiera lo hicieron por Dios y por la Patria como se estila al juramentar por un cargo público.
Pero tenemos lo que nos merecemos, por eso el voto no debe ser obligatorio, sólo deberían votar los que estan preparados para hacerlo.
